Para finalizar
con las adaptaciones al ejercicio, hoy hablaremos sobre las adaptaciones a
nivel neuronal que se producen durante el ejercicio.
En las primeras
semanas (6-8) de entrenamiento resistido, las ganancias de fuerzas son debidas
a mejoras o adaptaciones del sistema nervioso más que a la hipertrofia
muscular, está más que demostrado que existen adaptaciones en el sistema
nervioso central que mejoran la producción de fuerza de los músculos. Las
adaptaciones que se resumen en:
- Coordinación Intramuscular.
- Coordinación Intermuscular.
- Inhibición Autogénica.
- Coactivación.
Con
respecto a la coordinación intramuscular: se produce por la coordinación de las
unidades motoras de un mismo músculo. Se debe a 3 posibles factores:
- Aumento del Reclutamiento Espacial: Aumento de unidades motoras reclutadas para realizar el ejercicio o tarea.
- Aumento del Reclutamiento Temporal: ritmo o frecuencia de activación de las unidades motoras.
- Sincronización de Unidades Motoras: normalmente las unidades motoras se activan de forma asincrónica para producir movimientos suaves. El entrenamiento resistido (ej: halterofilia) permite la capacidad de activar a las unidades motoras de forma Sincronizada.

Con respecto a la
coordinación intermuscular: se produce por la coordinación de diferentes grupos
musculares implicados en una misma acción. La musculatura agonista para una
acción determinada, se coordinan sumando sus fuerzas y por consiguiente se
obtiene una mayor producción de fuerza.
Con respecto a la
inhibición autogénica: El órgano tendinoso de golgi es un receptor sensorial
situado en el interior de los tendones y que funciona como un mecanismo de
protección del sistema neuromuscular. Se activan cuando se produce una tensión
peligrosa en el complejo músculo-tendinoso. Se manifiesta en una relajación o
inhibición de las fibras musculares contraídas. El entrenamiento resistido
disminuye la acción del órgano tendinoso de golgi, permitiendo al músculo alcanzar
mayores niveles de fuerza.
Por último respecto a la coactivación: Las acciones involucran tanto a musculatura agonista
como antagonista. La musculatura antagonista ofrece una resistencia al
movimiento agonista, disminuyendo la producción de fuerza. Con el
entrenamiento resistido, se disminuye la resistencia producida por la
musculatura antagonista, permitiendo una mayor producción de fuerza por parte
de la musculatura agonista.